lunes, 26 de septiembre de 2011

Confía y cree en el Señor

  • “Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar. Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras almas; porque mi yugo es fácil, y ligera mi carga.” (Mt 11:28-30)
¿Cuantas veces hemos atravesado situaciones difíciles? ¿Cuántas veces nos hemos visto atrapados y sin salida? ¿Cuántas veces hemos sentidos el agua al cuello? Es curioso pero en esos momentos es cuando más fácilmente exclamamos ¡Dios mío, ayúdame! Pareciera que el ser humano se acuerdas de acudir a Dios solamente cuando las condiciones les son adversas.

Sin embargo, el Señor nos hace entender por medio de su Palabra que más que acudir a su persona cuando estamos en angustia, Él quiere que reposemos confiados en sus manos de amor y de paz. Busca que confiemos plenamente en Él y quiere despojarnos del yugo que nos oprime, que nos angustia, que nos esclaviza y que nos aparta de Dios.

Veamos un ejemplo claro de lo que quiere el Señor de nosotros cuando dice “Venid a mí…”.

  • "Pasando otra vez Jesús en una barca a la otra orilla, se reunió alrededor de él una gran multitud; y él estaba junto al mar... Fue, pues, con él; y le seguía una gran multitud, y le apretaban. Pero una mujer que desde hacía doce años padecía de flujo de sangre, y había sufrido mucho de muchos médicos, y gastado todo lo que tenía, y nada había aprovechado, antes le iba peor, cuando oyó hablar de Jesús, vino por detrás entre la multitud, y tocó su manto. Porque decía: Si tocare tan solamente su manto, seré salva. Y en seguida la fuente de su sangre se secó; y sintió en el cuerpo que estaba sana de aquel azote. Luego Jesús, conociendo en sí mismo el poder que había salido de él, volviéndose a la multitud, dijo: ¿Quién ha tocado mis vestidos? Sus discípulos le dijeron: Ves que la multitud te aprieta, y dices: ¿Quién me ha tocado? Pero él miraba alrededor para ver quién había hecho esto. Entonces la mujer, temiendo y temblando, sabiendo lo que en ella había sido hecho, vino y se postró delante de él, y le dijo toda la verdad. Y él le dijo: Hija, tu fe te ha hecho salva; ve en paz, y queda sana de tu azote. (Marcos 5:21, 24-34)

Estos versículos de la Palabra nos relatan la manera en que una mujer que padecía de flujo de sangre se atrevió a:

1.- Acercarse a Jesús luchando contra la sociedad

Para aquel tiempo el trato que se daba a personas como esta mujer era de exclusión por considerarles inmundos. Ella debía vivir apartada de la comunidad y cuando tenía que pasar por lugares públicos era necesario que gritara: ¡¡Inmunda, Inmunda!! a fin de que las personas se apartaran y no la tocaran pues esto les hacía inmundos también. 

Era por tanto una existencia miserable y en humillación. Las personas le trataban con desprecio por su condición de inmunda. Aun así decidió acercarse al Señor pues sabía que en él hallaría lo que buscaba.

2.- Colocar sus cargas en el Señor 

Tomó la firme determinación de ir hasta ese lugar y dejar reposar sus cargas, su aflicción y su pena en el Señor pues con toda su vergüenza se escabulló entre la multitud para tocar a Jesús y de esta manera poder reposar de su lucha.

3.- Creer

Dice la Palabra que esta mujer decía: "Si tocare tan solamente su manto, seré salva". Puso su fe y su esperanza en el maestro. Creyó en su corazón que Jesús era quien decía ser, el Hijo de Dios, por tanto, Dios hecho hombre. Un detalle curioso en este relato Bíblico es que ella NO pensó que sería sana, ella buscaba un reposo aun mayor que este. Ella anhelaba la salvación y creyó que en Jesús la hallaría.

Cuando nos acercamos al Señor Jesús podemos recibir más de lo que buscamos. Esta  mujer se acercó creyendo y buscando ser salva, pero al momento de tocar al Señor fue purificada, fue transformada, se le dio la sanidad física pero luego el Señor, haciendo cumplir Su Palabra, le salvó gracias a la fe que atesoró en su corazón. 

Hay dos detalles importantes a tomar en consideración. 

El primero es:

"había sufrido mucho de muchos médicos, y gastado todo lo que tenía, y nada había aprovechado, antes le iba peor"

Ella buscó la solución a su situación por muchos medios. Puedo imaginarla acudiendo a los adivinos, curanderos, hechiceros, etc., desesperada por tantos años de padecimiento pero no pudo hallar lo que buscaba. 

Igual es en la actualidad cuando vemos a miles en el ocultismo, la hechicería, la santería, en credos y religiones paganas, etc., buscando satisfacer sus necesidades más elementales como salud, economía, familia, amor; pero no logran llenar el vacío que hay en sus vidas y que solo puede ser cubierto por Dios a través de Jesucristo.

El segundo es:
"Entonces la mujer, temiendo y temblando, sabiendo lo que en ella había sido hecho, vino y se postró delante de él, y le dijo toda la verdad"

Ella testificó públicamente lo que había recibido. Sanidad y luego salvación. Hoy en día muchos se esconden y no son capaces de reconocer lo que Dios ha hecho en sus vidas. El testificar es esencial pues por el testimonio de uno solo muchos son despojados del yugo del pecado y de tantas otras cosas que atan sus vidas. Por un testimonio miles pueden hallar el amor de Dios, la sanidad en sus vidas y la Salvación de sus almas.

Esta mujer fue despojada del yugo de la enfermedad que la mantenía apartada de la sociedad, excluida y rechazada y fue despojada también del yugo del pecado pues para ser salva ella debía ser perdonada por el Señor primero. 

Es necesario entender que todos los seres humanos nacemos bajo el yugo del pecado y esto nos separa de Dios.

  • "Por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios." (Romanos 3:23)

  • "Porque la paga del pecado es muerte" (Romanos 6:23)


El hombre no puede salvarse a si mismo, le es imposible, pero Dios envió a Jesucristo para proveernos el camino para acercarnos a Él

  • "Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros" (Romanos 5:8).

  • Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí" (Juan 14:6).


Si Cristo es el único camino al Padre y a la Salvación, ¿Qué debemos hacer?, la respuesta es sencilla, debemos acercarnos a Él. ¿Cómo?

  • "Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios." (Juan 1:12)

  • "Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios; no por obras, para que nadie se gloríe." (Efesios 2:8-9)
No se trata de hacer buenas obras sino de fe. Recibimos a Cristo Mediante Una Invitación Personal, Cristo dice:
  • "He aquí yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré en él" (Apocalipsis 3:20).

 Hoy te invito a reflexionar en ello y a que tomes la decisión más determinante de tu vida, una decisión que es crucial por medio de la cual definirás donde has de pasar el resto de la eternidad.

Si estas palabras hoy han tocado tu vida y tu corazón te invito a que hagas una simple pero sincera oración como la que sigue pero con tus propias palabras y con sinceridad en tu corazón:

Señor Jesús, reconozco delante de ti que soy un pecador y que no merezco el sacrificio que hiciste por mi en la cruz del calvario. Sin embargo hoy me acerco a ti para declarar que creo firmemente que tu eres el Hijo de Dios, que diste tu propia vida para limpiarme de mis pecados, que fuiste sepultado y que al tercer día fuiste levantado de entre los muertos por Dios Padre y que hoy estas sentado a su diestra. Te pido que me perdones y que inscribas mi nombre en el libro de la vida y que no lo borres jamás. Lo pido en tu Santo Nombre. Amen.

Si has hecho esta oración te digo que hoy hay fiesta en los cielos por causa tuya. Acércate a una Iglesia Cristiana Evangélica donde se predique al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo y donde la Biblia sea la única y verdadera guía. Si lo has hecho te invito a que comentes este post para estar orando por ti.

Bendiciones

Wilmer Méndez (22/09/11)

viernes, 16 de septiembre de 2011

Como perder amigos rápidamente

Escrito por DAVID WILKERSON

Una de las mejores formas de perder amigos y ser rechazados, es caminar conforme a la voluntad de Dios. Tener seriedad en los asuntos espirituales, abandonar todos tus ídolos, volverte al Señor con todo tu corazón, quitar tus ojos de las cosas del mundo... Y ¡Repentinamente te has convertido en un fanático religioso y te hallas ante el peor rechazo por el resto de tu vida!   Cuando eras tibio, teniendo una forma de santidad sin poder, cuando no eras demasiado pecador o demasiado santo... tú no tenías problemas con nadie, ni aun con el diablo. Las cosas estaban tranquilas, eras aceptado. Tú eras justamente otro de los muchos creyentes indiferentes.   Pero has cambiado. Tuviste hambre de Dios. Te convertiste de tus pecados y no pudiste participar ya más de los juegos de la iglesia. Te arrepentiste y te volviste al Señor de todo corazón. Se vinieron abajo los ídolos. Empezaste a escudriñar la Palabra de Dios. Te detuviste de ir tras las cosas materiales y llegaste a obsesionarte con Jesús. Viniste a un nuevo reino de discernimiento y comenzaste a ver cosas en la iglesia, las cuales antes no te interesaban. Escuchas cosas desde el púlpito que quebrantan tu corazón. Ves a otros congregantes comprometidos con el mundo, exactamente como tú estabas una vez. Eso te lastima. Has sido despertado, cambiado, quebrantado y contrito en espíritu. Y tienes ahora una carga por la iglesia dada por Dios.   ¡Pero en lugar de que tus amigos se regocijen o entiendan, piensan que te estás volviendo loco!, llamándote fanático.   Cuando el Espíritu Santo me despertó hace años, cuando empecé a ver su llamado a la santidad; y me convencí realmente de caminar en la verdad y la palabra llegó a ser viva; y cuando empecé a ver cosas que nunca había visto antes, quise compartirlo con todos. Deseé y llamé a los predicadores por teléfono y compartí lo que Dios estaba diciendo. Con muchos que vinieron a mi oficina, lloré y saqué mi Biblia y les señalé las verdades gloriosas de una total rendición y pureza de corazón. Pensé que ellos lo verían también. Pensé que amarían la Palabra y caerían conmigo a orar para obtener un nuevo toque de Dios. En lugar de eso, la mayoría solamente me miraron diciendo cosas como: ¿Estas seguro que no te estas sobrepasando un poco? o, “Es un poco pesado para mí”. Entre más busqué a Dios, menos me entendieron. Fue como agua helada que arrojaron en mi cara. Ellos no querían escuchar.   Si esto te ha estado sucediendo desde que Dios te despertó, tú no estás solo. Quiero mostrarte y advertirte de acuerdo a la Palabra de Dios, que es lo que te espera si te has decidido a caminar de acuerdo a la voluntad de Dios. Debes esperar tres reacciones: 1. Serás rechazado 2. Serás echado 3. Serás apedreado.   1- Serás rechazado   Jesús advirtió: “Si fuerais del mundo, el mundo amaría lo suyo; pero porque no sois del mundo, antes yo os elegí del mundo, por eso el mundo os aborrece” (Juan 15:19). Muéstrame un creyente que haya llegado a amar tanto la Palabra, como hacedor de la verdad, y te mostraré uno que será rechazado y perseguido por la totalidad de la iglesia tibia. Abandona este mundo y ellos te abandonarán. Jesús tuvo muchos seguidores, hasta que la palabra que Él predicó fue percibida: –demasiado dura, demasiado exigente–. La multitud que amaba sus milagros escuchó sus declaraciones y lo abandonaron, diciendo: ¡Demasiado dura! ¿Quién puede recibirla? Jesús se volvió hacia los doce y preguntó: “¿Queréis acaso iros también vosotros?” o, ¿Es mi palabra demasiado dura para ustedes también? Pedro respondió: “¿A Quién iremos? Sólo Tú tienes palabras de vida eterna”. (Juan 6:67-68) No, Pedro y los otros once no se irían porque la mayoría de la gente decía que era demasiado dura, demasiado exigente, la amaban porque estaba produciendo en ellos valores eternos. Ellos permanecerían en la verdad, sin importar el precio.   Esta es la situación que cada cristiano debe afrontar en estos últimos tiempos: ¿Te vas a apartar de la Palabra que te convierte; verdad que señala tu pecado; verdad que remueve, corrige y arruina tus ídolos? ¿Verdad que te llama a quitar tus ojos de las cosas de este mundo, de ti mismo y del materialismo? ¿O te vas a apartar de escuchar un cosquilleo suave, sosegado de la verdad adulterada? ¿Vas a permitir que el Espíritu Santo te pruebe? ¿Te exponga?   La verdad te hace libre: Libre de predicaciones muertas; libre de pastores muertos; libre de tradiciones muertas; libre de doctrinas de demonios; libre de compañerismos que te desvían de la verdad porque es: “Demasiado comprometedora”, como la llaman ellos. Los hacedores de la verdad desean venir a la Luz, dejar que cada hecho secreto sea revelado, Jesús dijo: “Porque todo aquel que hace lo malo, aborrece la luz y no viene a la luz, para que sus obras no sean reprendidas. Mas el que practica la verdad viene a la Luz, para que sea manifiesto que sus obras son hechas en Dios”. (Juan 3:20-21).   Aquello que es verdad genuina, revela cada cosa oculta. Cuando Jesús empezó a sacar a la luz los pecados ocultos, los judíos religiosos buscaron matarlo. Jesús dijo: “Sé que sois descendientes de Abraham; pero procuráis matarme, porque mi Palabra no haya cabida en vosotros. Pero ahora procuráis matarme a mí, hombre que os he hablado la verdad, la cual he oído de Dios; no hizo esto Abraham. El que es de Dios, las palabras de Dios oye; por esto no las oís vosotros, porque no sois de Dios” (Juan 8:37,40 y 47).   Hay multitud de creyentes hoy en día que no aman la verdad. Dios dice que esto es a causa de su pecado secreto –“Se complacen en su iniquidad”-. Estos comprometidos amantes del placer están en un horrible engaño. Igual que los judíos de los tiempos de Jesús, están convencidos de que ellos ven. Creen que son hijos de Dios, y rechazan ferozmente cada palabra que revela sus más profundos secretos y codicias. Lo que tienen en sus corazones es algo diferente a la verdad. No están abrazando la verdad como una perla de gran precio. En vez de ello, acarician algún placer oculto, algún ídolo, algún pecado favorito.   Anótalo. Aquellos que te rechazan y abandonan por causa de la verdad, lo hacen porque te ven como una amenaza hacia lo que ellos estiman. Tu vida apartada es una reprensión a su forma de actuar y tibieza.   2- Te echarán   Jesús advirtió: “Os expulsarán de las sinagogas; y aun viene la hora cuando cualquiera que os mate, pensará que rinde servicio a Dios” (Juan 16:2). Jesús dijo: estas cosas les digo, para que no se entristezcan... no se sorprendan cuando las iglesias tibias los arrojen: “Porque no conocen al Padre ni a mí” (Juan 16:3)   Jesús sanó a un hombre que había nacido ciego. Fue traído a la iglesia para ser interrogado por los fariseos religiosos. Sus ojos se habían abierto: ¡Podía ver! Y dijo: “Una cosa sé, que habiendo yo sido ciego, ahora veo” (Juan 9:25). ¿Se regocijaron ellos porque este hombre había recobrado la vista? ¡No! “Respondieron y le dijeron: Tú naciste del todo en pecado, ¿Y nos enseñas a nosotros? Y le expulsaron” (Juan 9:34)   Ese hombre ciego representa el remanente santo –aquellos cuyos ojos han sido abiertos a la santidad de Dios–. Sigan adelante; testifiquen como él lo hizo ¡Antes estaba ciego y ahora veo! Ellos te echarán diciendo ¿Quién te ha hecho nuestro maestro? ¡Si tu pretendes caminar de acuerdo a la voluntad de Cristo, debes estar preparado para soportar su vituperio! “Porque por amor de ti he sufrido afrenta; confusión ha cubierto mi rostro. Extraño he sido para mis hermanos, y desconocido para los hijos de mi madre (mis hermanos y hermanas). Porque me consumió el celo de tu casa; y los denuestos de los que te vituperaban cayeron sobre mí” (Salmo 69:7-9). Esto habla primeramente de los sufrimientos de Cristo ¡Pero tal como Él estaba en este mundo, así estamos nosotros! Si ellos lo persiguieron y lo vituperaron, harán lo mismo con aquellos que mueren a sí mismos. ¿Quién vituperó a Cristo? ¿Quién amontonó deshonra sobre su cabeza y arrojó su nombre como una inmundicia? ¡La multitud de la iglesia centrada en el hombre!   ¡Echar a los creyentes santos, es el más grande favor que la iglesia centrada en el hombre, pudiera otorgarles! Escucho a cristianos decir: "Mi iglesia esta muerta ¡No me gusta lo que está pasando, pero Dios me puso aquí! Permaneceré y trataré de cambiar las cosas".Esto puede ser peligroso. También, puede ser la tradición la que te esté deteniendo. Puede ser que no estés listo para caminar de acuerdo a la voluntad de Dios como pensabas. Tus viejos amigos te detienen.   3- ¡Serás apedreado!   ¡Serás apedreado por la mayoría! “Y apedreaban a Esteban, mientras él invocaba y decía: Señor Jesús, recibe mi espíritu” (Hechos 7:59). ¡Había un hombre contra la multitud!   Aquí tenemos un hombre “¡Con sus ojos fijos en Jesús!”, Siendo aborrecido por sus opositores. Escuchen el odio de estos hombres con vestidura de fanático religiosos: “Y crujían los dientes contra él. Se taparon los oídos, y arremetieron a una contra él” (Hechos 7:54,57). ¿Qué fue lo que este hombre justo hizo para enfurecer a las multitudes religiosas? Predicó la verdad que les partió el corazón: “¡Duros de cerviz, e incircuncisos de corazón y de oídos! Vosotros resistís siempre al Espíritu Santo; como vuestros padres, así también vosotros. Vosotros que recibisteis la ley... y no la guardasteis” (Hechos 7:51,53). ¡Él tuvo que predicar la verdad! Ellos tenían su corazón aún ligado al mundo –atado por su codicia–. Sabían lo que era la ley de Dios, pero rehusaron obedecerla. Ellos crucificaron a Cristo.   La espada de dos filos de la verdad había partido lo más profundo de sus corazones. Pero fue su testimonio, cuando vio el cielo abierto, lo que atrajo la ira sobre él. “Pero Esteban, lleno del Espíritu Santo, puestos los ojos en el cielo, vio la gloria de Dios, y a Jesús que estaba a la diestra de Dios, y dijo: He aquí, veo los cielos abiertos, y al Hijo del Hombre que está a la diestra de Dios. Entonces ellos, dando grandes voces, se taparon los oídos, y arremetieron a una contra él. Y echándole fuera de la ciudad, le apedrearon” (Hechos 7:55-58).   Jesús enseñó una parábola del labrador que poseía una viña y envió por los frutos al tiempo de la cosecha. Envió a sus sirvientes. “Mas los labradores, tomando a los siervos, a uno golpearon, a otro mataron, y a otro apedrearon” (Mateo 21:35). ¡Así es hoy! Dios ha enviado sus santos atalayas a recoger el fruto de su viña. Pero en lugar de eso, hay palizas verbales, muertes con odio, apedreados con palabras hirientes. Tenemos hoy en día una “compañía de Esteban” quienes pueden decir: ¡He visto el cielo abierto! Esto es una clara visión de Jesús –esa cortante palabra de verdad, ¡que provoca la ira de aquellos incircuncisos de corazón!-   Los israelitas trataron de aprender a Josué y a Caleb por su llamado a caminar de acuerdo a la voluntad de Dios. Diez espías desalentaron al pueblo de Dios diciendo: No podemos ir. ¡Hay demasiados gigantes! ¡Demasiadas murallas altas! “Y Caleb dijo... subamos luego, y tomemos posesión de ella; porque más podremos nosotros que ellos” (Números 13:30). Pero ellos dijeron: “Designemos un capitán, y volvamos a Egipto” (Números 14:4) “Y Josué hijo de Nun y Caleb hijo de Jefone, que eran de los que habían reconocido la tierra, rompieron sus vestidos, y hablaron a toda la congregación de los hijos de Israel, diciendo: La tierra por donde pasamos para reconocerla, es tierra en gran manera buena. Si Jehová se agradare de nosotros, él nos llevará a esta tierra, y nos la entregará; tierra que fluye leche y miel. Por tanto, no seáis rebeldes contra Jehová, ni temáis al pueblo de esta tierra; porque nosotros los comeremos como pan; su amparo se ha apartado de ellos, y con nosotros está Jehová; no los temáis. Entonces toda la multitud habló de apedrearlos. Pero la gloria de Jehová se mostró en el tabernáculo de reunión a todos los hijos de Israel” (Números14: 6-10)   Mi interés en esta historia no es por Josué y Caleb, sino por Dios, que estaba con ellos. ¡Mi interés es por este pueblo de Dios que estaba crujiendo los dientes y recogiendo piedras! ¿Por qué un llamado a la obediencia provocó en ellos tal reacción? ¡Vean el llamado! Estoy convencido de que una vez que el corazón es capturado por un ídolo o codicia, la incredulidad se posesiona. La indiferencia y la incredulidad van de la mano. Por tal razón, toda predicación en contra de ser indiferentes al pecado los hace rechinar y terminan peleando contra Dios, mientras que ciegamente están confesando su nombre.   La recompensa de caminar de acuerdo a la voluntad de Dios   ¿Cuál es la recompensa? ¡Tener a Cristo junto a ti! Hay muchas otras recompensas por caminar de acuerdo a la voluntad de Dios, pero menciono sólo una, porque es todo lo que necesitamos. Pablo estaba encarcelado en una fortaleza en Jerusalén, mientras todo el sistema religioso buscaba matarlo. La iglesia estaba consternada. Él fue acusado de “Profanar el lugar santo, de predicar una falsa doctrina”. Aun los soldados “temieron que Pablo fuera despedazado”; así es que lo arrebataron de en medio de ellos y lo apresaron en un castillo. “A la noche siguiente se le presentó el Señor y le dijo: Ten ánimo, Pablo, pues como has testificado de mí en Jerusalén, así es necesario que testifiques también en Roma” (Hechos 23:11”)   El mismo Señor le habló a Pablo -¡no un ángel!- Y qué palabra: ¡ANÍMATE! ¡HAY MAS POR VENIR! ¡Pero podrás enfrentar cualquier circunstancia o a cualquier persona si sabes que: EL SEÑOR ESTA CONTIGO!  

martes, 13 de septiembre de 2011

Santo

Según la RAE (Real Academia Española), santo es:

Perfecto y libre de toda culpa; Bondadoso, de especial virtud, abnegación y ejemplo; Sagrado, inviolable.

Santo, Bíblicamente hablando, es el que se aparta para Dios. Alguien que se aparta de carnalidades y pecados a fin de servir y agradar a Dios ya que sin santidad es imposible agradarle y sin ella nadie vera Su rostro. Tanto la definición Bíblica como la RAE concuerdan en que quien es santo tiene cualidades inherentes de un ser vivo consciente. Dicho de otra forma, de personas vivas.

Hace poco, un forista que debatía conmigo exponía algunos textos bíblicos con los que buscaba defender la teoría o el dogma de que las personas que han fallecido son hechos santos y al estar más cerca de Dios pueden interceder por nosotros los vivos, sin embargo, ninguno de estos textos prueba esa teoría sino que habla de ciertas situaciones que, mal enfocadas, dan como resultado el error doctrinal.

A continuación están los textos citados y la respuesta que el Señor me permitió dar a ellos:
  •  “Y he aquí dos varones que hablaban con él, los cuales eran Moisés y Elías; quienes aparecieron rodeados de gloria, y hablaban de su partida, que iba Jesús a cumplir en Jerusalén” (Lc 9:30-31)

Elías no vio muerte, fue traspuesto, levantado en vida por el Señor. Moisés si vio muerte pero habiendo vivido en obediencia a Dios por la fe es galardonado con la vida eterna. Ellos no están intercediendo por ninguno, ellos están en la gloria de Dios porque así le ha placido al Padre.
  •   “Y se abrieron los sepulcros, y muchos cuerpos de santos que habían dormido, se levantaron; y saliendo de los sepulcros, después de la resurrección de él, vinieron a la santa ciudad, y aparecieron a muchos” (Mt 27:52-53)

En estos versículos se hace mención a hombres santos que habían muerto, es decir, personas que vivieron una vida de santidad, no muertos hechos santos.

  • En el cual también fue y predicó a los espíritus encarcelados” (1P 3:19)

El infierno existe, es un lugar de sufrimiento eterno, no un sitio en el que se destruye al ser y listo. La muerte espiritual es la separación del hombre de Dios y esto eternamente. Esto quiere decir que el alma es inmortal. El espíritu pertenece a Dios, recuerda que el espíritu del hombre es el soplo de vida que Dios nos da pero este le pertenece, es decir también el espíritu es inmortal. La carne es la que es finita. Este pasaje no habla de santos sino de aquellos que estaban bajo pena espiritual, sometidos a castigo por sus pecados cometidos. Al que es santo no hay manera de castigarle por cuanto no tiene un delito que imputarle.

  • “Y de la mano del ángel subió a la presencia de Dios el humo del incienso con las oraciones de los santos” (Ap 8:4)

Con este verso el hombre que debatía conmigo pretendía probar que los muertos oran en el cielo para interceder por nosotros. Las oraciones suben ante la presencia de Dios como humo de incienso, como olor grato delante de Dios. Estas son las oraciones de aquellos que “viven” en santidad y adoran a Dios en espíritu y en verdad, se refiere a los hombres y mujeres que están vivos y se mantienen santos. Si fueran oraciones de quienes viven en el cielo ¿para que debieran subir?

  • “Pues todos sois hijos de Dios por la fe en Cristo Jesús” (Gal 3:26)

  •  “Pues no habéis recibido el espíritu de esclavitud para estar otra vez en temor, sino que habéis recibido el espíritu de adopción, por el cual clamamos: !!Abba, Padre! El Espíritu mismo da testimonio a nuestro espíritu, de que somos hijos de Dios” (Ro 8:15-16)

  •   “En amor habiéndonos predestinado para ser adoptados hijos suyos por medio de Jesucristo, según el puro afecto de su voluntad” (Ef 1:5)

Con estos versos quiso decir que todos los seres humanos somos hijos de Dios para poder justificar que los que mueren van a la presencia del Padre, pero esto no es así. Todos los seres humanos somos “criaturas”, creación de Dios, pero solo son hijos de Dios quienes han puesto su fe UNICAMENTE en JESUCRISTO, así está claramente expresado en Juan 1:12 “Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios” De hecho, cada uno de estos textos, extraídos de las epístolas del Apóstol Pablo, están dirigidos a Iglesias ya establecidas para aquella época, en otras palabras, esas afirmaciones son para quienes ya eran creyentes en Cristo, a los hijos de Dios.

El hecho de ser un hijo de Dios (Cosa que es por gracia Suya y no por merito nuestro) nos llena de responsabilidades y nos exige principalmente vivir en santidad. La Palabra dice que “Ninguno que milita se enreda en los negocios de LA VIDA, a fin de agradar a aquel que lo tomó por soldado” (2Ti 2:4). Es decir, “VIVE” en santidad para agradar a Dios. Este es un asunto de vivos, no de muertos. "Los muertos nada saben y su memoria es puesta en el olvido" (Ec 9:5), ¿Cómo, pues, podrán dedicarse a ser santos y a apartarse del mal?

  • “Así que ya no sois extranjeros ni advenedizos, sino conciudadanos de los santos, y miembros de la familia de Dios, edificados sobre el fundamento de los apóstoles y profetas, siendo la principal piedra del ángulo Jesucristo mismo, en quien todo el edificio, bien coordinado, va creciendo para ser un templo santo en el Señor; en quien vosotros también sois juntamente edificados para morada de Dios en el Espíritu” (Ef 2:19-22)

  • “Porque por un solo Espíritu fuimos todos bautizados en un cuerpo, sean judíos o griegos, sean esclavos o libres; y a todos se nos dio a beber de un mismo Espíritu. Además, el cuerpo no es un solo miembro, sino muchos” (1Co 12:13-14)

  • “Así nosotros, siendo muchos, somos un cuerpo en Cristo, y todos miembros los unos de los otros” (Ro 12:5)

Recordemos nuevamente el concepto, santo es aquel que se aparta para Dios. Este versículo no habla de los muertos. Hace mención de quienes viven en santidad, debemos tener en cuenta que en Efeso, en Corinto y en Roma se habían levantado Iglesias conformadas por quienes eran anteriormente los gentiles, es decir, por quienes no eran parte del pueblo escogido de Dios (Israel), no formaban parte de Su familia hasta que, por medio de la fe en Jesucristo fueron hechos miembros de esta. Y aun había Judíos convertidos al Cristianismo que podían libremente compartir con los demás pues estaban unificados bajo una misma fe. 

  • “Para que no haya desavenencia en el cuerpo, sino que los miembros todos se preocupen los unos por los otros. De manera que si un miembro padece, todos los miembros se duelen con él, y si un miembro recibe honra, todos los miembros con él se gozan” (1Co 12:25-26)

Este texto Bíblico nos permite comprender que como miembros de un mismo cuerpo todos debamos padecer o alegrarnos en la afición o en el gozo de cada uno de los miembros. Si yo, andando descalzo, pisara un clavo sentiría dolor en mi pie, pero acusaría dolor mi boca y todos los músculos de mi cara lo avalarían con la expresión. Pero eso no quiere decir en ninguna manera que un hombre que haya muerto pueda dolerse con los vivos y por tanto interceder a favor de estos. No se lee nada de eso allí.

  • “Sino que siguiendo la verdad en amor, crezcamos en todo en aquel que es la cabeza, esto es, Cristo, de quien todo el cuerpo, bien concertado y unido entre sí por todas las coyunturas que se ayudan mutuamente, según la actividad propia de cada miembro, recibe su crecimiento para ir edificándose en amor” (Ef 4:15-16)

Este verso fué usado para defender la posición de la “comunión de los santos”. Ese término ha sido tergiversado por el catolicismo llevando lo que debe ser la comunión entre hermanos en la fe en Cristo Jesús a una supuesta comunión con aquellos que han muerto. Eso no tiene ningún sentido. La comunión es entre seres vivos. Solo veamos lo que dice el texto: “…se ayudan mutuamente, según la actividad propia de cada miembro…” Actividad, un muerto no tiene actividad de ningún tipo. Ni siquiera espiritualmente pues éste simplemente está esperando sin conciencia alguna el momento del juicio. “Y de la manera que está establecido para los hombres que mueran una sola vez, y después de esto el juicio” (He 9:27)

Adicionalmente agrego lo siguiente:

Muerte por definición es separación; Comunión es tener participación en lo común.

No es posible perder la comunión con una persona fallecida porque simplemente no participa activamente debido a su separación de la vida de lo que para los vivos es algo común como la fe.

La línea doctrinal romanista de mi amigo forista está errada en cuanto a su percepción de los muertos, de lo que es la santidad y de lo que es la comunión.

Estudiemos las Escrituras pues en ellas hallaremos la verdad que es Cristo.

Bendiciones.

martes, 2 de agosto de 2011

Los apóstoles fueron solo 12


Hoy en día se quiere hacer creer que el apostolado es algo vigente tal como se estableció en los tiempos del Señor Jesucristo y quiero decir algo al respecto: "LOS APOSTOLES FUERON SOLO 12" (sacando a Judas y colocando a Pablo por supuesto). Un apóstol hoy en día es el que llamamos MISIONERO, pues cumple la labor de ir a fundar y levantar iglesias, tal como lo hicieran ellos. Los 12 rendían cuenta al Pastor de los pastores, no al revés, los Pastores están jerárquicamente sobre los apóstoles o misioneros y estos últimos deben sujetarse bajo la autoridad dada por Dios a los primeros.

No nos dejemos engañar pues es cumplimiento fiel de la Palabra que en estos tiempos finales surgirán falsos maestros, falsos profetas, falsos apóstoles, falsos cristos que engañaran aun si fuere posible a los escogidos. Debemos estar alerta, velando y orando y no creer todo lo que se nos dice sino que leyendo la Palabra con entendimiento y bajo la real dirección del Espíritu Santo podamos discernir y separar la falsa doctrina de la verdadera porque si viniere un ángel del cielo con otro evangelio, sea anatema. Estamos en tiempos peligrosos y se han levantado toda clase de vientos de doctrinas inspiradas por el enemigo en los corazones de hombres incautos que buscan para si las riquezas del mundo olvidando totalmente las enseñanzas del Maestro que dijo: “haceos tesoros en el cielo, donde ni la polilla ni el orín corrompen, y donde ladrones no minan ni hurtan” Mateo 6:20, y es que lamentablemente estos hombres amadores de si mismos, hacedores de maldad, que traen consigo espíritu de error se están prestando para estas cosas que lo que buscan es destruir a la iglesia del Señor.

Amado hermano y hermana en Cristo si tienes alguna duda acerca de estas cosas y no sabes si tus lideres te están enseñando la verdad yo te ruego en el Nombre del Señor Jesús que abras tu corazón y tus sentidos espirituales a la voz de Dios y puedas comprobar a través de la oración y la búsqueda profunda de su rostro cual es su voluntad, agradable y perfecta.

Si lo único que escuchas en tu congregación es:

-          "prosperidad"
-          "declaración positiva"
-          "sanidad interior"
-          "siembra"
-          "pacto"
-          "encuentros"
-          "nueva unción"
-          "declaración profética"
-          “decretos”, etc.

Y nunca escuchas acerca de:

-          La Salvación
-          La Gracia por encima de las obras,
-          La perdición de los impíos,
-          Del bautismo,
-          Del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo,
-          Del rapto de la Iglesia,
-          De la Segunda venida de nuestro Señor Jesucristo,
-          Del gran trono blanco,
-          De las señales antes del fin,
-          Del lago que arde con azufre y fuego,
-          De la santidad como requisito indispensable para llegar a ver el rostro del Señor,
-          De la verdadera fe que agrada a Dios,
-          De la gran ramera,  
-          De la bestia,
-          Y de la necesidad de predicar estas cosas para que otros lleguen a la comprensión de que necesitan a Jesucristo para ser salvos del castigo eterno, pues permíteme invitarte como dice la Palabra: 

"Por lo cual, salid de en medio de ellos, y apartaos, dice el Señor" (2 Corintios 6:17

Es mi pequeña colaboración para que se desenmascare toda esta patraña del apostolado profético que lo que esta haciendo es sumir a la iglesia en materialismo, en idolatría, en hechicería y sobre todo en apostasía por medio de la cual se pierde irremediablemente la salvación.

"La gracia del Señor Jesucristo, el amor de Dios, y la comunión del Espíritu Santo sean con todos vosotros. Amén."
 
P.D.: Quisiera agregar algo más en este tema; al comienzo dije que Pablo sustituyó a Judas en el apostolado y quizás alguno pueda decir que no es así ya que en el Libro de los Hechos de los Apóstoles, en su capitulo 1 se habla de la elección del sucesor de Judas.

Yo quiero exponer mi opinión para que entiendan por qué afirmo que solo fueron 12 y no 13 contando a Matías quien salió electo en esta especie de concilio dado en Jerusalén.

Motivo 1: La Palabra dice: 

“Y orando, dijeron: Tú, Señor, que conoces los corazones de todos, muestra cuál de estos dos has escogido, para que tome la parte de este ministerio y apostolado, de que cayó Judas por transgresión, para irse a su propio lugar.” (Hechos 1:24-25)

Ellos oraron, pero si leemos el siguiente versículo nunca vemos que Dios haya contestado a esa oración sino que más adelante en el mismo Libro vemos como el Señor Jesucristo se revela a Saulo de Tarso (luego Pablo) y habiéndole hecho pasar por desierto lo eligió y lo envió a la obra del ministerio que es el apostolado.

Motivo 2 La Palabra dice:

“Y les echaron suertes, y la suerte cayó sobre Matías; y fue contado con los once apóstoles” (Hechos 1:26)

Los apóstoles “echaron suertes” sobre ellos a ver quien quedaba designado, fue una decisión arbitraria, humana, carnal en virtud de llenar un espacio del cual el Señor nunca dijo nada. Yo me pregunto: ¿Será que hacer las cosas al azar es algo que Dios apruebe? ¿Será que de esa manera actúa el Señor? Definitivamente no.

Fijémonos que el Señor Jesús fue y buscó uno por uno a sus discípulos y luego los preparó y los capacitó para la obra antes de enviarlos. No digo que Matías no estuviera preparado, de hecho el estuvo desde el principio con el Señor, pero el proceder de los apóstoles no fue el indicado.

Ahora, con Pablo fue diferente ya que tal como con los demás apóstoles el mismo Señor le hizo el llamamiento. Es decir, no lo eligió el hombre, lo eligió Dios.

Este es parte de mi razonar en torno a este tema. Pueden hacer llegar sus comentarios y dudas.

Dios les continúe Bendiciendo cada día más.

lunes, 18 de julio de 2011

Nuestra fe ¿Firme o dudosa?

"Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente; no temas ni desmayes, porque Jehová tu Dios estará contigo en dondequiera que vayas" (Josúe 1:9)
 
¿Has creído al Señor cuando te dice que si te arrepientes de tus pecados, te apartas del mal, sigues su camino y confiesas que Jesucristo es el Señor tendrás vida y vida en abundancia?

¿Realmente has puesto tu confianza en su Omnipotencia?

Realicemos un pequeño análisis de nuestra fe.

La Palabra de Dios nos enseña que la fe es "la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve" (He 11:1), sin embargo, en muchas ocasiones incurrimos en el error que cometió el Apóstol Tomás cuando dijo "Si no viere en sus manos la señal de los clavos, y metiere mi dedo en el lugar de los clavos, y metiere mi mano en su costado, no creeré" (Jn 20:25); y muchas veces lo hacemos sin darnos cuenta ya que, aunque no estamos diciendo las mismas palabras, dudamos de sus promesas y pensamos en nuestro corazón que ¡¡SI!!, Él nos oye y todo lo demás pero si no escuchamos su potentisima voz hablar a nuestro oído entonces no vamos a aceptar las palabras del Profeta, la exhortación del Evangelista o el consejo amoroso del Pastor; y en esta situación yo me pregunto ¿Acaso no es esta la misma clase de incredulidad y aun peor que la que demostró aquel hombre de Dios?

Y nos excusamos a nosotros mismos diciendo ¿Que de Pedro? ¿Acaso este no dudó cuando le dijo al Señor "si eres tú, manda que yo vaya a ti sobre las aguas" (Mt 14:28)?

Muchas veces, caminando en medio de su luz, miramos hacia las tinieblas del mundo y decimos ¿Sera esta la verdadera voluntad de Dios? Dudamos; cuando nos distraemos de su Palabra, cuando corremos a buscar bienes materiales como si no existiera nada más, cuando en medio de una lucha decimos ¿Señor donde estas?, en ese preciso instante nos estamos haciendo aun más incrédulos que aquellos que estuvieron con el Señor, y aun peor, nos hacemos vulnerables a los ataque del que vino "para hurtar y matar y destruir" (Jn 10:10)

Ahora bien, nuestra vida en el Señor depende absolutamente de la fe, pues bien lo dijo el Profeta "el justo por su fe vivirá" (Hab 2:4). La calidad de nuestra relación con Dios depende y es reflejo de cuanta confianza pongamos en Su Palabra, sin dudar acerca de ningún concepto, precepto, ordenanza, llamado o profecía que venga del Señor y sus siervos; no podemos ponerlo a prueba, no podemos dudar de su sabiduría, ni de la dirección que recibimos del Espíritu Santo y menos del amor de Cristo.

Poner en tela de juicio la veracidad de la Palabra del Señor es como dudar del perdón y salvación recibidos por medio de su sacrificio en la cruz del calvario.

Este tipo de situaciones en las que vacilamos en cuanto a lo que puede hacer Dios en nuestras vidas, en las vidas de quienes nos rodean y en lo que puede hacer a través de nosotros, suceden muy a menudo cuando estamos atravesando por un desierto, es decir, cuando enfrentamos situaciones adversas, bien sean de carácter económico, de salud, familiares, dentro de la Iglesia, etc; en la mayoría de los casos nunca notamos que estas situaciones no suceden para que dudemos sino para:

  • Demostremos cuan fuerte estamos sujetos a la roca que es Cristo
  • Para dar testimonio de que todo lo podemos en Cristo que nos fortalece (Fil 4:13) 
  • Para que el Señor nos moldee de acuerdo a Su Voluntad.

Dios es fiel y nunca nos permitirá ser tentados más de lo que podamos resistir sino que nos dará la salida junto a la tentación (1Co 10:13)

Cuando estamos llenos de esas dudas que nos pone el enemigo en nuestro corazón debemos sujetarnos a esa hermosa Palabra dada por el Señor allá en el Antiguo Testamento en la que nos da un mandamiento y una promesa:  

"Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente; no temas ni desmayes, porque Jehová tu Dios estará contigo en dondequiera que vayas" (Jos 1:9)

No temas, no desmayes, Él esta contigo donde te encuentres, en la situación que sea, en la lucha, en la prueba, en el gozo y en el llanto, en la alegría y en las tristezas, en la salud y en la enfermedad, en la abundancia y en la austeridad tal cual el Novio que es de su Iglesia que le espera y que le ama.

No pierdas la fe que hay en tu corazón, acreciéntala, fortalécela, llénala de Él y descansa en sus brazos de amor y de tranquilidad, recuerda que ni aun las puertas del Hades prevalecerán contra su Iglesia (Mat 16:18), mucho menos lo harán los problemas y dificultades porque la presencia de Dios estará contigo siempre.

Bendiciones.

jueves, 14 de julio de 2011

Dar aliento

¿Que podemos hacer cuando alguien que esta en los caminos del Señor siente que se desmorona, que su mundo no es tan perfecto como creía y que sus dudas son, en oportunidades, mayores que su fe? ¿Qué hacer cuando recurre a ti, hombre y mujer de Dios, para expresar sus inquietudes?

Tengo un amigo al que aprecio mucho y que hace poco tiempo tomo la decisión más importante de su vida: Aceptar a Cristo en su corazón; este hermano es una persona muy sensible ante las situaciones de vida como por ejemplo los problemas familiares, los conflictos laborales, etc. Es, en definitiva, un ser humano, como tu que lees y como yo que escribo, un ser de carne y huesos que siente y padece así como cada uno de los que vivimos en este mundo.

El fue tocado por el Señor durante una visita a nuestra congregación y fue quebrantado por el Espíritu Santo a tal punto que tuvo que reconocer que Dios es real, que es mas que una religión, que es mucho mas que mera palabrería sino que esta vivo y que se hace sentir con poder.

En muchas oportunidades de nuestras vidas nos conseguimos con situaciones que, si no estamos bien parados sobre la roca que es Cristo y afianzados en la fe que es en Cristo Jesús, nos pueden llevar a dudar de la soberanía de Dios e incluso a creer que podemos cuestionar Sus designios.

Creemos que nuestra opinión es mas sabia que la de Dios y caemos en el error de decir "Dios es cruel", "Dios es injusto" o inclusive "Dios no parece existir al permitir tantos males". Querid@ amig@ y herman@, quiero decirte que no importa la situación que estés atravesando, no importa cuan difícil sea la lucha, Dios esta contigo. Decía el Salmista: "Aunque ande en valle de sombra de muerte, no temeré mal alguno, porque tú estarás conmigo" (Salmos 23:4)

Oportunidades no faltan para que cada creyente reniegue de su fe dando un paso atrás y apartándose del dador de la vida. Sobran excusas como estas:

  • "Que mi pareja me hace la guerra por ser creyente", 
  • "Que mi familia se burla de mi fe y no me apoya"
  • "Que no doy la talla como hijo de Dios"
  • "Que no merezco estar con los que si son buenos de verdad porque yo soy una mala persona";

Todas y cada uno de estos pensamientos son producto de un minucioso, constante e insistente ataque del enemigo quien astutamente coloca estos pensamientos en nuestros corazones en circunstancias que son adversas y difíciles para nosotros.

Este hermano al cual hago referencia ha atravesado por situaciones similares a estas y su corazón ha sido minado pensando que Dios se ha equivocado al elegirle a el. Se ha enfriado su vida espiritual. Es una tarea difícil el mostrarse ante el como un panel de hielo que no se inmuta sino que se muestra confiado ante tal situación sin siquiera mostrar un toque de preocupación, pero hay que estar seguro que el Señor hará la obra mucho mas allá de nuestras carencias y de nuestras limitaciones.

Pero me gozo en Dios por la sabiduría que fué vertida en Su Palabra ya que en ella encontramos las respuestas para cada situación de nuestras vidas, en lo personal y en la relación entre hermanos en la fe. La Biblia nos enseña que es nuestra responsabilidad como Cristianos el instruir, corregir y ayudar a aquellos que se han debilitado en la fe.

  • Romanos 14:1 dice: “Recibid al débil en la fe, pero no para contender sobre opiniones” 
  • Romanos 15:1 establece: “Así que, los que somos fuertes debemos soportar las flaquezas de los débiles”; y esto por medio de la Palabra.   
  • 2 Timoteo 3:16 dice: “Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia”

Confío en el Señor que Él le hará entender a través de su Palabra y de sus siervos que todo el que esta en Cristo es una nueva criatura y que el pasado esta olvidado delante de Dios (2Co 5:17), que un corazón humillado nunca es rechazado por Dios (Sal 51:17), que no hay pecado imperdonable sino que quien confiesa su pecado delante del Señor y se aparta del mal alcanza Su misericordia (Sal 28:13) y que Dios es verdad, que nunca se equivoca en Sus designios y que Su justicia es incuestionable (Dt 32:4; Sal 119:137; Sal 19:9).

Dios les Bendiga

martes, 28 de junio de 2011

La Salvación es por medio de Jesucristo


Alguien me decía que estamos en una epoca de arrepentimiento, que debemos tratar de salvarnos y que nos hace falta ser mas espirtuales.
Ciertamente estamos en momentos Biblicamente establecidos como "los tiempos postreros", por lo que se nos hace necesario arrepentirnos de nuestros pecados, apartarnos de nuestra vana manera de vivir y de creer, pero esta persona tiene un error fundamental y es que nosotros los seres humanos no podemos tratar de salvarnos a nosotros mismos y mucho menos se trata de ser más espiritual. Espirituales son los budistas y ellos no son salvos; espirituales son los hinduistas y no son salvos; espirituales son los mahometanos y ellos tampoco cuentan con la salvación.
Amig@s, no hay que ignorar que la salvación no es posible sino a través de la fe en JESUCRISTO, única y exclusivamente en él. No hay manera de llegar a Dios sino por medio de Jesucristo:

  • "Jesus les dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre sino por mi" (Juan 14:6)
En relación a este importantísimo tema la Biblia declara lo siguiente:

  • “El Señor no retarda su promesa, según algunos la tienen por tardanza, sino que es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que TODOS PROCEDAN AL ARREPENTIMIENTO” (2 Pedro 3:9)


    • "De tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que TODO AQUEL QUE EN ÉL CREE, no se pierda, mas tenga vida eterna" (Juan 3:16)
     

    • “ . . . Señores, ¿qué debo hacer para ser salvo? Ellos dijeron: CREE en el Señor Jesucristo, y SERÁS SALVO tu y tu casa" (Hechos 16:30-31)
     

    • “Porque todo aquel que invocare el nombre del Señor, será salvo” (Romanos 10:13) 
     

    •  "Esta es la palabra de fe que predicamos: que si CONFESARES CON TU BOCA que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, SERÁS SALVO. Porque con el corazón se cree para justicia, pero CON LA BOCA SE CONFIESA PARA SALVACIÓN (Romanos 10:8-10)


    ¿Entonces, cual es la manera de salvarse?

    1. Arrepintiendose de todo corazón
    2. Creyendo en Jesucristo como único Señor y suficiente Salvador de tu vida.
    3. Confesando esa fe.
     
    La salvación no se puede ganar porque el hombre no tiene nada que ofrecerle a Dios a cambio, la salvación es un regalo del Padre a quienes lo quieran recibir y este regalo se recibe POR LA FE EN JESUCRISTO:

    • "Porque por gracia (regalo inmerecido) sois salvos POR MEDIO DE LA FE; y esto no de vosotros, pues es don de Dios; NO POR OBRAS, para que nadie se gloríe" (Efesios 2:8-9)

    No se trata de ser espiritual ni de tratar de salvarse a uno mismo, se trata de poner la fe en la persona indicada y esa persona se llama Cristo Jesus, el Hijo de Dios, Dios hecho hombre.

    Bendiciones.

    lunes, 20 de junio de 2011

    Llevar la Palabra de Salvación a toda criatura

    ¿Que tan importante es llevar la Palabra de Dios a las personas que conocemos y aun a aquellos que no conocemos?

    Quizás no nos demos cuenta por nuestra inexperiencia (los jóvenes), tal vez sea por nuestras limitaciones de tiempo o por falta de conocimiento (nuevos creyentes), pero esta es una gran labor que no debe ser descuidada. El entregar tratados bíblicos en una plaza, en una esquina, cerca de nuestros hogares, en los lugares de trabajo o de estudio, en el transporte o frente a nuestra Iglesia es en muchas oportunidades algo que nos produce fatiga en lugar de gozo. Tomar una Biblia, un megáfono y salir con un par de hermanos a proclamar el evangelio y la palabra de salvación se nos hace anticuado y poco practico. El hacer una campaña en una calle, plaza o avenida parece cosa del pasado, muy pocas veces visto en la actualidad.

    Amad@ Herman@ y amig@, quiero decirte en esta oportunidad que caemos en error cuando desechamos estas practicas porque son una forma a través de la cual podemos hacer llegar la Palabra de nuestro Dios a muchas personas y de esta manera damos cumplimiento a aquel mandamiento que nos dio el Señor Jesucristo antes de partir para sentarse a la diestra de Dios Padre cuando dijo: "Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura" (Marcos 16:15), nótese que el verso no dice "si puedes", "si tienes tiempo", "si quieres", "si te acuerdas"; ¡¡¡NO!!! En ningún lugar dice estas cosas, en lugar de eso hace notoria la calidad de mandato "Id", es decir "anda", no como si hiciera una petición sino como quien ordena.

    Leía una reflexión acerca de un hombre que en su juventud viajo a los Alpes franceses y consiguió una amplia extensión de tierra estéril y desolada y en ella un hombre que con una vara hacia agujeros y sembraba en ellos bellotas y decía este ultimo: he sembrado mas de mil pero talvez no crezcan sino una décima parte de ellas. Pasados unos 25 años este viajero regreso al lugar y lo que halló lo sorprendió ya que en lugar de un valle estéril se encontró con una gran extensión de bosques llenos de vida, de aves y de muchos animales, y es que así nosotros no lleguemos a visualizar el resultado de nuestros esfuerzos en llevar y sembrar esa semillita que es la Palabra de Dios, tal vez nuestros hijos y nietos si alcancen a contemplar el resultado de nuestra obediencia al Señor.

    "Procura con diligencia presentarte a Dios aprobado, como obrero que no tiene de qué avergonzarse, que usa bien la palabra de verdad" (2Timoteo 2:15). 

    Debemos esforzarnos y salir cada dia con la conviccion de que asi seamos rechazados y hechos a un lado, tenemos recompensa en el cielo tal como lo dice la Palabra: "Gozaos y alegraos, porque vuestro galardón es grande en los cielos;" (Mateo 5:12) y recuerda que la obediencia es una virtud que el Señor premia.

    Dios te Bendiga.

    martes, 14 de junio de 2011

    Las señales nos lo advierten, el fin está cerca

    Hace algún tiempo atras compartía con un compañero de labores sobre las cosas que están aconteciendo en el mundo actualmente y le explicaba que las constantes inundaciones, los terremotos cada vez mas fuertes y destructivos, la pobreza creciente, el alto índice de criminalidad y muertes por violencia, la hambruna y todos los cambios drásticos que sufre nuestra tierra están todos registrados en la Palabra de Dios y que esto es señal inequívoca de la inminente segunda venida de nuestro Señor Jesucristo.

    Este joven, incrédulo, respondía firmemente "NO, ESO NO ES ASI", y justificó su respuesta de la siguiente manera:

    "las cosas que están ocurriendo en el mundo no pasan porque estén escritos en la Biblia, sino que son únicamente una consecuencia del daño que nosotros le hacemos al planeta".

    Lo que quizás el no sabe es que seria tonto pensar que Dios haría cumplir estas cosas en un parpadeo, sino que al igual que cuando Noé, la lluvia tardo 40 días y 40 noches continuas para arrasar con la vida (Gn 7:12) y aun prevalecieron las aguas sobre la tierra 150 días mas (Gn 7:24); no destruyo Jehová todo de un solo tajo sino que fue un proceso que tuvo una duración determinada, así mismo son las cosas que están ocurriendo.

    Los fenómenos naturales:

    Sabemos que la voluntad de Dios es perfecta y que Él la hace cumplir de la manera que quiere en Su soberanía, sin embargo, tal como lo expresé antes, cada cosa lleva un proceso, por eso es que nunca veríamos que los alimentos de desvanecen en el aire para decir que hay hambruna, ni tampoco veríamos que un caudaloso río se seca en su lecho en cuestión de segundos para hablar de escasez, ni veríamos otros desastres naturales llegar en plena bonanza y en un planeta excelentemente conservado.

    El Evangelio según Mateo testifica lo siguiente:

    "Porque se levantará nación contra nación, y reino contra reino; y habrá pestes, y hambres, y terremotos en diferentes lugares." (Mt 24:7)

    Esto es dicho por el Señor Jesucristo cuando sus discipulos le preguntan acerca de las señales que han de venir antes del fin. Este tipo de manifestaciones se han visto antes en la historia, ciertamente que si, pero nunca en la magnitud, profundidad, alcance y regularidad con la que se estan dando en estos dias. 

    Los fenomenos sociales:

    Todas las cosas tienen una causa primaria que produce un efecto; fue la desobediencia de Adán y de Eva lo que causo su destierro del huerto del Edén; fue la maldad desbordada y las pasiones desordenadas las que condujeron a la destrucción de Sodoma y de Gomorra (Gn 19:1-25); fueron las iniquidades y desobediencias del pueblo de Israel lo que causo que Dios permitiera su cautividad en Babilonia.

    Es la maldad y la falta de amor en el ser humano de la actualidad la que desemboca en los fenómenos que se ven hoy día en nuestra tierra. ¿Qué como es esto?, veamos lo que dice en el Evangelio según Mateo:

    “y por haberse multiplicado la maldad, el amor de muchos se enfriará” (Mt 24:12)

    Se enfriará el amor de muchos y eso es vivido ya que guiados por la avaricia y el egoísmo destruimos el ambiente para enriquecernos sin pensar que hay una humanidad entera que necesita de ese aire que estamos ensuciando, de ese suelo donde ya no se podrá sembrar los alimentos del mañana, de ese mar para que produzca peces en abundancia, de esos bosques que ya no nos proveerán del aire que necesitamos.

    Se enfriara el amor de muchos y por ello vemos a madres que asesinan a sus hijos aun antes que nazcan, vemos como el hombre no valora la vida del prójimo sino que hace lo posible por destruírsela a quien no ve con agrado.

    La maldad se multiplicará y por eso observamos como se realizan miles de pruebas de armas de destrucción masiva sobre la superficie del planeta anualmente solo por el afán de conquistar y destruir al que tiene algo que yo quiero y que mi nación necesita sin ver el daño que esto causa.

    Nosotros hemos sido destructores de nuestro planeta para cumplimiento de la palabra y eso es algo irrefutable.

    Bien dice la Palabra acerca del hombre:

    “Y como ellos no aprobaron tener en cuenta a Dios, Dios los entregó a una mente reprobada, para hacer cosas que no convienen; estando atestados de toda injusticia, fornicación, perversidad, avaricia, maldad; llenos de envidia, homicidios, contiendas, engaños y malignidades; murmuradores, detractores, aborrecedores de Dios, injuriosos, soberbios, altivos, inventores de males, desobedientes a los padres, necios, desleales, sin afecto natural, implacables, sin misericordia; quienes habiendo entendido el juicio de Dios, que los que practican tales cosas son dignos de muerte, no sólo las hacen, sino que también se complacen con los que las practican” (Ro 1:28-32)

    Es de esperar que todas las cosas que están pasando sean la consecuencia de nuestros actos y por supuesto nos espera una represalia de parte de Dios por el mal que hemos hecho tal y como ha sucedido en el pasado incluso con su propio pueblo escogido.

    Esto es lo que el hombre ha elegido ser y hacer pero no es la unica opción, hay una salida a tanto mal y al posterior castigo, esa salida se llama Jesucristo.

    El dice: “Yo soy el camino y la verdad y la vida” (Jn 14:6) solo Él nos puede salvar de tan grande reprimenda solo debes invitarle a que entre en tu corazón. Es tiempo preciso de volver nuestros rostros a Cristo porque las señales están dadas, el tiempo se agota y la oportunidad cada vez es mas pequeña.

    Dios te Bendiga.

    viernes, 3 de junio de 2011

    Es el tiempo

    Hermanos y hermanas en Cristo Jesús, Señor y Salvador nuestro por la gracia de Dios Padre. La paz y el amor de Dios sean con todos ustedes.

    Amad@s, es tiempo de que salgamos a predicar, tiempo de decirle al mundo que Cristo les ama y les amó de tal manera que dio Su propia vida a cambio de la nuestra. Es tiempo de decirles que así como Él fue levantado de la muerte, tiene Poder para dar vida a todo aquel que la quiera recibir.

    No es momento de jugar a la tolerancia con el pecado, no es tiempo de ocultarnos bajo una falsa y engañosa moral que es conforme a este siglo y no conforme a Dios. Nuestro Señor Jesucristo fue tajante y frontal, al pecado llamó pecado, a la impiedad llamó impiedad, a la injusticia llamó injusticia, a los escribas y fariseos les llamó hipócritas, a los temerosos llamó cobardes.

    ¿Seremos nosotros más que el Señor Jesús para llamar bueno a lo que es malo?

    El Apóstol Pablo dijo, siendo inspirado por el Espíritu Santo de Dios:

    “… ¿qué compañerismo tiene la justicia con la injusticia? ¿Y qué comunión la luz con las tinieblas? ¿Y qué concordia Cristo con Belial? ¿O qué parte el creyente con el incrédulo? ¿Y qué acuerdo hay entre el templo de Dios y los ídolos?" (2Co 6:14-16)

    Varones y mujeres, guerreros de Dios, el tiempo se acaba, coloquémonos de una vez nuestras armaduras espirituales, revistámonos del Espíritu Santo y salgamos a luchar la buena batalla, a arrebatarle de las manos al diablo las almas de aquellos que andan sin esperanza, muertos en sus delitos y pecados, haciendo los deseos de la carne y desechando a Dios. Para ellos también hay oportunidad, no seamos ahorradores de la Palabra, salgamos y demos lo que por gracia hemos recibido.

    Somos la luz del mundo, tenemos a Dios de nuestro lado, es tiempo de resplandecer en medio de tantas tinieblas.

    Dios les Bendiga+

    lunes, 30 de mayo de 2011

    La Religión


    Estaba leyendo un foro de debate acerca de la religión y mi atención fue rápidamente acaparada por varios comentarios que me motivaron a publicar esta nota a fin de que algunas dudas sean aclaradas si es que en alguno de los que leen pueda existir alguna de ellas.

    En este foro se discutía inicialmente si lo que había entre el creyente y Dios era una “religión” o era una “relación”; solo que se desvió un poco hacia la crítica de algunos cuya opinión hacia Dios y hacia quienes le amamos no es la más agradable. Veamos que tipo de comentarios surgieron y que tipo de respuestas fueron necesarias desarrollar para dirimir este asunto.

    1.-     "El Dios del Antiguo testamento es un Dios vengativo y  destructor al que no se le puede hablar de tu a tu y el del Nuevo Testamento es uno que te ofrece amor y un acercamiento personal, ¿Como es posible esto, acaso son dos dioses?

    “Jesucristo es el mismo ayer, y hoy, y por los siglos” (Hebreos 13:8)

    Él no cambia ni se transforma, es siempre igual, constante, inalterable en Su carácter y postura. Dice la Palabra que Dios es amor (1 Juan 4:8), pero también dice que es fuego consumidor (Hebreos 12:29).

    Pensemos en esto por un instante:

    “Porque el Señor al que ama, disciplina, y azota a todo el que recibe por hijo” (Hebreos 12:6)

    El pueblo de Israel acababa de terminar con 230 años de esclavitud en Egipto; traían consigo costumbres y creencias propias de los egipcios, los cuales rendían culto a muchas deidades. Estas prácticas religiosas en las que se vio envuelta toda aquella congregación israelita eran abominación ante los ojos de Jehová ya que solo Él es Dios.

    Dios es santo, santo, santo y por esto aborrece al pecado; aceptar al pueblo de Israel con todas las contaminaciones religiosas y morales adquiridas en tiempo de esclavitud sería negarse a si mismo. Por este motivo instituyó leyes muy severas para ellos a fin de que se apartaran de sus malos caminos y volvieran sus rostros definitivamente al Dios verdadero, a Él.

    Pero el que su ira pudiese caer sobre el pueblo no hace a Dios un ser vengativo sino que es justo y su justicia en inconmensurablemente mayor a la nuestra. Insisto en esto: Dios es santo, santo, santo y por esto aborrece al pecado, mas no así al pecador, he aquí el por que de todas las cosas. Siendo santo no puede tolerar el pecado por lo que da castigo a quienes lo practican. Pero porque es amor nos dio a su Hijo para que todo aquel que en él crea no se pierda más tenga vida eterna; nuestro Señor Jesucristo, siendo Dios, no reparó en ello sino que proveyó en sí mismo el sacrificio perfecto a ofrecer por nuestros pecados. A lo largo del antiguo testamento se ofrecía holocausto o sacrificio una vez al año para rogar a Dios por un año más de perdón y que su ira no cayera sobre el pueblo, más el sacrificio de la cruz fue definitivo y perfecto por lo que no es necesario ningún otro sacrificio para alcanzar su perdón. En esto vemos el proceder justo de Dios y como mantiene su desaprobación ante el mal, en que ya el pago por ello fue consumado.

    2.-     "Hay muchas religiones como el Cristianismo, el budismo, el hinduismo, etc. y creo que ninguna de ellas tiene la verdad acerca de Dios"

    La religión no salva, solo nos llena de muchas cosas innecesarias delante del Señor, rituales, creencias, prácticas que en nada aprovechan sino que redundan en inutilidad. Quien salva es Cristo y esto por el infinito amor del Padre.

    El Cristianismo no es una religión, es vivir conforme a la Palabra de Dios y quien la vive puede dar testimonio de que todos los días las cosas son nuevas, son diferentes, no se vive de una repetición o de un calco del día o de la semana o del mes anterior.

    Por otro lado, nunca veremos en el seno de las religiones mundiales que su fundador o principal exponente se haya declarado la verdad absoluta, sin embargo vemos como Jesucristo asi lo dice refiriéndose a si mismo. Aceptar que cada religión tiene una parte de la verdad acerca de Dios sería como decir que hay muchos caminos para acercarse a Él, pero la Biblia testifica otra cosa diferente, veamos las Palabras de Jesús:

    “Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí.” (Juan 14:6)

    Jesús es el único camino que nos acerca al Padre. Lo curioso de este texto es que no dice “nadie ‘va’ al Padre” sino que declara “nadie ‘viene’ al Padre”, es decir el Hijo y el Padre son uno.
     3.-     "La Biblia me parece un libro lleno de contradicciones, muy complicado de leer y además, como se que es correcto si existe también el Coran (Musulmanes), el Popol Vuh (Mayas), las Vedas (Hinduismo), etc."


    La Biblia no es un libro complicado, solo hay que leerlo con entendimiento y bajo la dirección del Espíritu Santo. Dice que Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia, a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda buena obra. En otras palabras es el manual de vida del cristiano, allí esta contenida la mente del Señor y todo lo necesario para vivir correctamente y conforme a la voluntad de Dios. La Biblia, siendo inspirado por Dios, gana en autoridad por sobre todos los tomos escritos por hombres por medio de los cuales se fundaron las religiones conocidas en la actualidad.

    La Biblia no se contradice. Habla de manera concreta y con seguridad. Dios, quien inspiró la Biblia, no es hombre para mentir ni es hijo de hombre para arrepentirse (Números 23:19) por lo tanto no dice una cosa y luego otra contraria.

    4.-     "En nombre de Dios se han llevado a cabo las peores matanzas de la historia, como por ejemplo las cruzadas, la conquista y colonización de América, etc."

    Ciertamente estas cosas terribles han sucedido en la historia de la humanidad, sin embargo quisiera aclarar que no es Dios quien se equivoca sino el hombre cuando quiere hacer de Dios su excusa para conseguir sus metas personales. Dios no ordeno esas matanzas, fue el hombre hablando profanamente en el nombre del Señor. Fue la ambición del Imperio Romano a través de su nuevo y silencioso modo de colonización (la religión) lo que dio lugar a las cruzadas en un intento desesperado de colocar de nuevo a sus pies los espacios perdidos en todo su extenso imperio y más allá. No fue sino el deseo expansionista de las potencias Europeas lo que las llevó a realizar sus colonizaciones y colocar al nombre de Dios por delante para "bendecir" estas atrocidades, sin embargo hay que reconocer un propósito que aunque no nos agrade debemos admitirlo y es que sin estas cosas condenables hubiese sido muy difícil si no imposible que millares de personas durante la historia y en la actualidad supieran de la existencia del Dios verdadero. Bien dice la Palabra:

    "Porque mis pensamientos no son vuestros pensamientos, ni vuestros caminos mis caminos, dijo Jehová. Como son más altos los cielos que la tierra, así son mis caminos más altos que vuestros caminos, y mis pensamientos más que vuestros pensamientos" (Isaías 55:8-9)

    En conclusión, podemos decir que Dios es perfecto, invariable, infalible e inescrutable en sus caminos; que Su Palabra es fiel, clara y verdadera; que nos ofrece salvación y una relación verdadera basada en el amor en lugar de religión y que Jesucristo es el único medio posible para que el ser humano pueda:

    -. Alcanzar el perdón de los pecados que nos separan del Padre;
    -. Obtener la salvación y
    -. Disfrutar de la vida eterna.

    Si aun no disfrutas de este regalo hermoso que es la vida eterna, te invito a que abras tu corazón a Jesucristo, Él está llamando ahora mismo a la puerta y espera ansioso a que tu abras para entrar y establecer casa en tu vida, en tu corazón. Búscalo ahora que tienes oportunidad, luego puede ser demasiado tarde.


    El Señor les continúe bendiciendo.

    viernes, 29 de abril de 2011

    Las 4 Leyes Espirituales

    Hoy quiero hablarles acerca de las Leyes Espirituales. Y es que así como hay leyes físicas que rigen el Universo, también hay leyes espirituales que rigen nuestra relación con Dios. En total son 4 Leyes que nos pueden ayudar a comprender de manera más profunda nuestra situación espiritual y el plan de Dios para nuestras vidas.

    Veamos en que consisten estas Leyes y cuanto podemos aprender de ellas:

    PRIMERA LEY

    [Dios te AMA, y tiene un PLAN MARAVILLOSO para tu vida. ]

    • El amor de Dios
    "Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a Su Hijo unigénito, para que todo aquel que en El cree, no se pierda, mas tenga vida eterna." (Juan 3:16)

    • El propósito de Dios
    (Cristo dice:). "Yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia" (Juan 10:10)

    ¿Por qué la mayoría de personas no experimentan la vida en abundancia?
    Esa respuesta la encontramos en la siguiente Ley


    SEGUNDA LEY

    [El hombre es PECADOR y esta SEPARADO de Dios; por lo tanto no puede conocer ni experimentar el amor y el plan de Dios para su vida.]

    • El hombre es pecador
    "Por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios." (Romanos 3:23)
    El hombre fue creado para tener relación perfecta con Dios, pero debido a su egocentrismo y desobediencia, escogió su propio camino y la relación con Dios se interrumpió. Este acto de voluntad propia que se manifiesta por una actitud de rebelión activa o indiferencia pasiva, es una evidencia de lo que la Biblia llama pecado.

    • Esta separado
    "Porque la paga del pecado es muerte" (Romanos 6:23)

    ¿Qué entendemos por muerte?
    Aquí entendemos la muerte como la separación espiritual de Dios.

    ¿Habrá alguna solución para este problema?
    La Tercera Ley nos da la única solución a este problema
     

    TERCERA LEY

    [Jesucristo es la UNICA provisión de Dios para el pecador. Solo en el, puedes conocer el amor y el propósito de Dios para tu vida.]

    • El Murió en Lugar Nuestro
    "Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros" (Romanos 5:8).
      
    • El Resucito
    "Cristo murió por nuestros pecados... Fue sepultado..., Resucitó al tercer día, conforme a las Escrituras;... Y apareció a Cefas... Y después a los doce... Después apareció a más de quinientos." (1a Corintios 15:3-6).

    • El es el Único Camino
    "Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí" (Juan 14:6).

    Ahora que sabemos que Jesucristo es la provisión que Dios nos da, ¿Qué debemos hacer ahora?
    Veamos la cuarta ley


    CUARTA LEY

    [Debemos RECIBIR a Jesucristo como Señor y Salvador mediante una invitación personal; entonces podremos conocer y experimentar el amor y propósito de Dios para nuestras vidas.] Veamos lo que la Biblia nos enseña acerca de esto:

    • Debemos Recibir a Cristo
    "Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios." (Juan 1:12)

    • Recibimos su Salvación Por Fe
    "Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios; no por obras, para que nadie se gloríe." (Efesios 2:8-9)

    Es decir, la salvación no es cuestión de cuantas obras buenas hagamos sino de la fe que depositemos en Jesucristo ya que la salvación es un regalo de Dios que nos da por amor, no algo que podamos ganar por nuestra cuenta.

    • Recibimos a Cristo Mediante Una Invitación Personal:
    Cristo dice: "He aquí yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré en él" (Apocalipsis 3:20).

    El recibir a Cristo implica volvernos a Dios (en arrepentimiento) confiando que Cristo viene a nuestras vidas, perdona nuestros pecados y hace de nosotros la persona que quiere que seamos. No es suficiente dar un asentimiento intelectual a sus pretensiones ni aún tener una experiencia emocional.

    ¿Tienes alguna razón por la cual no deseas recibir a Cristo ahora? ¿Qué te lo impide?

    PUEDES RECIBIR A CRISTO AHORA MISMO MEDIANTE LA FE EXPRESADA EN UNA ORACION
    (La oración es hablar con Dios)

    Dios conoce tu corazón y  no tiene tanto interés en tus palabras, sino más bien en la actitud de tu corazón. Pero yo te sugiero como guía la siguiente oración (No la hagas como una mera repetición, apropiate de ella):

    "Señor Jesús, reconozco que soy un(a) pecador(a) y que  te necesito. Te doy gracias por perdonar mis pecados. Hoy te abro las puertas de mi corazón y te recibo como Señor y suficiente Salvador de mi vida. Toma el control de mi ser. Hazme la clase de persona que quieres que sea. Escribe mi nombre en el libro de la vida y no lo borres nunca, te lo pido en tu Santo Nombre, Amen"

    Si has hecho esta oración quiero darte la mayor "BIENVENIDA" pues ahora eres una hijo de Dios y formas parte de su gran familia. Hay fiesta en los cielos por tu decisión!!!


    Sugerencias Para El Crecimiento Cristiano

    El crecimiento espiritual es resultado de confiar en Jesucristo. "El justo vivirá por fe" (Gálatas 3:11). Una vida de fe que te capacitará para confiar en Dios progresivamente en cada detalle de tu vida y a practicar lo siguiente:

    C.
    Conversa con Dios en oración diariamente (Juan 15:7).
    R.
    Recurre a la Biblia, estudiándola diariamente (Hechos 17:11).
    Empieza con el Evangelio de San Juan que es el Evangelio de la fe.
    I.
    Insiste en confiar a Dios cada aspecto de tu vida (1a Pedro 5:7).
    S.
    Sé lleno del Espíritu de Cristo. Permítele vivir su vida en ti (Gálatas 5:16-17; Hechos 1:8).
    T.
    Testifica a otros de Cristo verbalmente y con tu vida (Mateo 4:19, Juan 15:8).
    O.
    Obedece a Dios momento a momento (Juan 14:21).
    En Hebreos 10:25, se nos amonesta a que no dejemos de reunirnos. Varios carbones arden fuertemente cuando están juntos, pero al separarlos se apagan. Lo mismo acontece en tu relación con Dios y con otros cristianos. Por esta razón te sugiero que, ahora que has creído y eres una nueva criatura, comiences a congregarte en una iglesia cristiana donde se exalte a Cristo y se predique su Palabra. Empieza esta semana y haz planes para asistir a ella regularmente.